La cooperación con entidades de otros países para realizar proyectos conjuntos de investigación, desarrollo e innovación puede ser una muy buena estrategia para que las empresas y entidades logren objetivos que por sí solos no se podrían plantear.
Sea cual sea el ámbito de conocimiento intercambiado, la participación en proyectos europeos suele ofrecer diversos beneficios destacables:
– Acceso a información relevante sobre la temática del proyecto, así como sobre las oportunidades y experiencias de mejora detectadas en otras zonas geográficas.
– Desarrollo de ideas nuevas, estudios, material didáctico, prototipos, publicaciones, etcétera.
– Recuperación de una parte de la inversión efectuada y, por tanto, condiciones económicas muy favorables para nuevos desarrollos.
– Celebración de eventos con expertos y stakeholders sobre la materia en los cuales realizar networking y alcanzar nuevos contactos.
– Apertura de nuevos mercados y futuras oportunidades comerciales.
– Adquisición de prestigio y mejora de la imagen por parte de las entidades participantes.
A grandes rasgos, existen dos vías principales de cooperación internacional en proyectos europeos:
1- Participar en proyectos concretos en el marco de convocatorias públicas, estructurando consorcios con clientes, proveedores, administraciones públicas, universidades y centros de investigación de otros países.
2- Integrarse en foros internacionales, como redes, comités, grupos de trabajo, plataformas, etc., que sean solicitantes directos de ayudas en convocatorias específicas.
La participación en proyectos europeos de Cambra Barcelona comprende numerosos temas y sectores, y pone en valor la amplia red de contactos y campos de acción de la Corporación, vinculada a otras cámaras, instituciones, universidades, administraciones públicas, asociaciones, escuelas de negocios y empresas de ámbito local, estatal e internacional.